¿Quien vela por la seguridad de la mujer?
Me gustaría que alguien me contestara a una pregunta relacionada con este tema. ¿Cuándo una mujer casada o que convive con su pareja es maltratada o violada y pone una denuncia y se condena a esa mala persona con una orden de alejamiento, dónde están las personas que "supuestamente" tienen que velar por la seguridad de esa mujer?, ¿porqué siempre estos "tiparracos" vuelven a cometer la misma acción sin que nadie ponga remedio?, y ¿porqué cuando son encarcelados los aíslan de los demás presos para que no corran peligro de ser violados o maltratados por los demás presos si ellos han hecho lo mismo con sus mujeres?. Desde mi punto de vista, yo creo que deberían pasar por lo mismo que pasaron ellas y así se darían cuenta del gran dolor que causaron a estas mujeres.
No estoy a favor de la pena de muerte, aunque a veces he pensado que más de uno se lo merece, pero lo que si debería de existir es una ley donde estos individuos sufran lo que ellas pasaron en su momento y se les pague con la misma moneda Estoy hablando tanto de los que violan y maltratan a sus mujeres como a los pederastas que tampoco escaparían de este castigo.
Y un mensaje muy importante para todas las mujeres, a la mínima que observen que su pareja no respeta su vida de alguna manera, ya sea física y/o psicologicamente (bofetadas, empujones, etc...), den la alerta, no se callen, que no tienen nada que perder sino mucho que ganar.
Este mensaje no va sólo dirigido a las mujeres, sino también a los hombres que pasan por esto, que también los hay.
1 comentario
Miralarima -
que oculta daños a todos,
evita mostrar los golpes,
se encuentra hundida en el lodo,
acumula las lesiones
y se hunde más en el foso.
Suena la puerta. La llave.
Entra. Ruido. Se acerca.
Hoy ha bebido. Y lo sabe.
Una puerta que se cierra.
¡Niña!¡Golfa!¡Mala madre!
Pasos. Golpes. Ya se acerca.
¿A dónde fuiste esta tarde?
A ningún sitio- Contestas.
Temblor en la voz. Que pare.
Lloras. Temes. Gimes. Rezas.
Por favor, que no me mate.
Ya llegó. Abre tu puerta.
No sabes cómo mirarle.
¡¿Qué haces?! ¡¿Por qué te encierras?!
Solo tratas de explicarte.
Primer golpe. No lo yerra.
Huyes. Tratas de escaparte.
Te ha cogido. No te deja.
Y ya ha vuelto a golpearte.
Caes al suelo. Te ves muerta.
Ojalá se canse antes.
Te desprecia. No te quiere.
Siempre quiere controlarte.
No es amor lo que te tiene.
Los celos no son garante.
No lo hagas. Ni lo pienses.
Decídete a denunciarle.
Te echaste atrás otras veces.
Y ya ha vuelto a maltratarte.