El amor de una madre
No se puede medir el amor que siente una madre por sus hijos; desde el momento en que los sientimos dentro de nosotras ya comienza a crecer ese sentimiento que nos hace pensar solamente en su bienestar, en su felicidad y en su suerte.
Nos pasamos la vida, dandolo todo por ellos, sean grandes o pequeños, esten en casa o independizados, casados o solteros; la preocupacion siempre esta en nosotras.
Los aconsejamos para que no cometan los mismos errores una y otra vez, aunque a veces sea en vano, ya que sienpre hacen lo que quieren.
Otras veces, nos reprochan el que estemos siempre doiciendoles las cosas, se creen grandes e independientes, pero al final cuando tienen algun problema acuden a nosotras para que les aconsejemos y para que les ayudemos a salir adelante.
En ocasiones, dejamos a un lado nuestras ilusiones y sueños, solo por ellos, arriesgandonos a perder nuestra felicidad para que ellos se sientan bien, y al final, nos dejan solas, pero eso es ley de vida, y contra lo que no podemos luchar, la pena es que se dan cuenta cuando ya son mayores y tienen ellos sus propios hijos.
Es cuando verdaderamente entienden el esfuerzo y los sacrificios que han de hacer para que sus hijos sean felices, y cuando comprenden el verdadero amor de una madre.
2 comentarios
Aguadeluna -
Nataly -
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