Me encontre a un amigo recien retirado
El otro día, me encontré a un amigo recién retirado que disfrutaba mucho con su trabajo. Ahora anda un poco raro y para él la vida se le ha convertido en eso: en echar días para atrás. Sin embargo, estoy convencida de que, tras ese parón inicial que supone la retirada de toda actividad laboral, el ser humano es capaz de encontrar el camino por el que avanzar y no sólo dejarse llevar como un autómata.
Hay personas que la interpretan como simple elemento para iniciar una conversación y otros la dicen en sentido literal. Y mala es cosa es ésta última. Tendemos a interpretar que “echar días para atrás” es no aprovechar el momento y no se deben desperdiciar los días sino vivirlos intensamente; aunque esto no quiere decir que debamos estar en todos lo sitios; sino precisamente disfrutar del lugar y del momento que ahora vivimos. Vemos a personas retiradas que parecen, aparentemente, languidecer en los bancos de los parques, y creemos que retirarse de la vida laboral no debe significar “echar días para atrás”, porque si no estaremos cometiendo el mayor error de nuestras vidas; precisamente en una etapa que, llena de experiencia, no debe sucumbir al “dejarse arrastrar” por el inevitable paso del tiempo.
1 comentario
Alejandro Pardellas -
Un saludo!